Para los miembros que colaboran, ayudarse unos a otros es más importante que competir unos contra otros.
2. Actitud: Apoye a sus compañeros en lugar de sospechar de ellos Hay personas que se preocupan tanto por sus intereses que sospechan de todo el mundo, incluyendo sus compañeros de equipo. Pero adoptar la actitud de completar la tarea y no competir con sus compañeros es posible sólo si deja de sospechar de los demás y se transforma en alguien que apoye. Es cuestión de actitud. Esto significa asumir que los motivos de las demás personas son buenos mientras no se pruebe lo contrario. Si usted confía en la gente, los va a tratar mejor. Y si los trata mejor, ambos estarán en mejores condiciones de crear una relación de colaboración.
3. Enfoque: Concéntrese en el equipo, no en usted Como parte de un equipo, por lo general hará una de dos preguntas cuando ocurra algo: «¿Cómo me beneficia esto?» o «¿Cómo beneficia esto a mi equipo?» Donde ponga su atención dirá mucho sobre si compite con otros o los complementa. El escritor Cavett Roberts lo dice de esta manera: «El verdadero progreso en cualquier campo es una carrera de relevo y no una carrera individual». Si se enfoca en el equipo y no sólo en usted, podrá pasar el batón cuando sea necesario en lugar de tratar de completar la carrera solo. El verdadero progreso en cualquier campo es una carrera de relevo y no una carrera individual. —Cavett Roberts
4. Resultados: Cree la victoria a través de la multiplicación Cuando trabaja junto a sus compañeros de equipo puede hacer cosas muy importantes. Si trabaja solo, se le quedan muchas victorias sobre la mesa. La colaboración tiene un efecto multiplicador en todo lo que hace porque libera y
perfecciona no sólo sus habilidades sino las de los miembros de su equipo.
ALGO PARA PENSAR
¿Es usted una persona colaboradora? Quizás no esté trabajando contra el equipo, pero eso
no significa necesariamente que esté trabajando para él. ¿Aporta colaboración y añade valor a sus compañeros de equipo aun cuando sean personas que no le simpatizan
totalmente? ¿Ayuda a multiplicar los esfuerzos de los demás? ¿O el equipo se hace lento
y menos eficaz cuando usted participa? Si no está seguro de las respuestas, hable con sus
compañeros de equipo.
ALGO PARA HACER
Para convertirse en un jugador de equipo que sea colaborador …
• Piense en ganar, ganar y ganar. El rey Salomón, del antiguo Israel, dijo: «Hierro
con hierro se aguza; y así el hombre aguza el rostro de su amigo».3
Por lo general,
cuando colabora con otros, usted gana, ellos ganan y el equipo gana. Busque a
alguien en el equipo con una función similar a quien haya visto antes como un
competidor. Piense en las formas en que pueden compartir información y trabajar
juntos para beneficio de ambos y del equipo.
• Complemente a otros. Otra forma de colaborar es encontrar a alguien que sea
fuerte en las áreas en que usted es débil y viceversa. Busque a otros en el equipo
con habilidades complementarias y trabajen juntos.
• Sálgase del panorama. Hágase el hábito de preguntarse qué es lo mejor para el
equipo. Por ejemplo, la próxima vez que esté en una reunión para resolver
problemas, y todos estén aportando ideas, en lugar de promoverse, pregúntese
cómo funcionaría el equipo si usted no estuviera involucrado en la solución. Si
conviene, proponga ideas que promuevan e involucren a otras personas.
Por lo general, cuando colabora con otros, usted gana, ellos ganan y el equipo gana.