Las últimas semanas, me he estado tapando los ojos antes de mirar mis inversiones y solo mirando a través de mis dedos, como si estuviera frente a Freddy Kruger en lugar de una serie de números. No ayuda que los titulares financieros estén llenos de futuros potenciales aterradores: una posible recesión, guerras comerciales y posibles correcciones del mercado.
Es suficiente para hacerme querer sacar todo mi dinero de mis inversiones y ponerlo en un lugar seguro, como mi colchón.
Pero no importa cuán abrumadora pueda ser una fluctuación del mercado, también sé que sacar mi dinero del mercado es lo peor que puedo hacer cuando mi cartera tiende a la baja. Eso es porque la única forma de garantizar que las pérdidas momentáneas se vuelvan permanentes es vender.
Por supuesto, saber que debe mantener el rumbo es mucho más fácil decirlo que hacerlo. Si siente la tentación de reducir sus pérdidas cuando escucha predicciones financieras pesimistas, es especialmente importante aprender a mantener la calma. Aquí hay algunas maneras en que puede mantener la calma cuando el mercado da miedo.
Recuerda que está bien esconderse
Ocultar la cabeza en la arena recibe muchas críticas, pero hay ocasiones en las que realmente es el mejor curso de acción. Eso se debe a un sesgo cognitivo que nos impulsa a tomar medidas en respuesta al miedo. Sentimos que hacer cualquier cosa, incluso si es contraproducente, es preferible a quedarse sentado sin hacer nada. Pero escuchar el sesgo de acción es la razón por la cual la gente vende cuando el mercado está en su punto más bajo y compra cuando está en su punto más alto. Tienen miedo de no hacer nada.
Dado que es casi imposible superar la voz en nuestras cabezas que nos grita «¡Haz algo!» cuando el mercado está cayendo, el método más sencillo para superar el sesgo de acción es simplemente ignorar su cartera.
Por supuesto, eso no significa que nunca deba verificar sus existencias. Sin embargo, consumir obsesivamente noticias financieras y revisar su cartera a diario lo llevará a tomar decisiones basadas en el miedo (o en la codicia), en lugar de seguir su estrategia de inversión racional.
En su lugar, planifique verificar el rendimiento de sus inversiones en un horario regular, ya sea cada mes o cada trimestre. Esto le brindará la información que necesita para mantener equilibrada su asignación de activos y realizar los cambios necesarios, sin ser víctima del sesgo de acción.
Toma consuelo en la historia
Aunque la frase «el desempeño pasado no es garantía de resultados futuros» está casi tatuada en la frente de todos los analistas bursátiles y planificadores financieros, hay una buena razón para observar el desempeño pasado del mercado en su conjunto. Si estudia las tendencias a largo plazo y los rendimientos históricos generales, verá que los mercados inevitablemente tienden al alza.
Saber que el mercado se recuperará no hace que las pérdidas a corto plazo y la volatilidad sean más divertidas de vivir, pero es más fácil poner en contexto las pérdidas momentáneas que está experimentando. Los inversores inteligentes que no entraron en pánico durante las correcciones del mercado de 2000 y 2008 vieron cómo sus carteras se recuperaban con el tiempo. A pesar de lo estresante que puede ser cualquier caída, confiar en un plan de inversión sólido y en las tendencias históricas a largo plazo del mercado puede ayudarlo a mantener el rumbo y sentirse seguro de que usted y su dinero llegarán al otro lado.
Hacer un plan de volatilidad
Una de las razones por las que tendemos a reaccionar exageradamente ante la volatilidad es porque olvidamos que es una parte natural de los mercados financieros. Las recesiones del mercado son normales y deberíamos esperar superar varias de ellas en una larga carrera inversora. Sin embargo, a menudo esperamos que los mercados solo suban. Con ese tipo de expectativa, incluso una pequeña caída puede resultar abrumadora.
Una buena manera de contrarrestar esas expectativas (y el miedo resultante cuando no se cumplen) es crear un plan de lo que hará durante una recesión.
Su plan de volatilidad podría ser tan simple como comprometerse con su estrategia de cabeza en la arena para las recesiones. Saber de antemano que reducirá los ingresos de su cartera cuando las cosas se vean sombrías puede ayudarlo a cumplir con ese plan.
Su plan también puede ser proactivo, en lugar de solo reactivo. Dado que sabe que las caídas del mercado son normales y naturales, decida con anticipación cómo incorporará estas fluctuaciones en su estrategia de inversión. Puede decidir comprar más inversiones durante una recesión, en lugar de verlo como algo a lo que temer.
No entrar en pánico
Los seres humanos no están programados para ser inversores racionales, razón por la cual tendemos a ser tan malos en eso. Nuestras emociones pueden sacar lo mejor de nuestras estrategias racionales, especialmente cuando sentimos miedo. Pero vender sus inversiones debido a la volatilidad del mercado y los titulares aterradores es usar una solución permanente para un problema temporal.
Piense en cómo responder a los cambios aterradores del mercado antes de que sucedan. Entonces sabrá que ya tiene un plan al que recurrir, y es menos probable que simplemente reaccione por miedo.